Al ser atractivo y popular, hay mucha gente que lo escoge como perro de familia, pero si no se adiestra correctamente, su comportamiento se vuelve incontrolable.
Es muy buen perro pastor, y tiene el instinto de guiar lo que él considere un rebaño, ya sea otros perros o incluso niños. Esa faceta de su carácter, junto con la inmensa energía que tiene, puede convertirse en un problema. No obstante, el Border Collie aprende muy rápidamente y responde muy bien al refuerzo positivo.
El Border Collie es una raza ruidosa y no duda en requerir atención ladrando. La mejor manera de evitar que esto se convierta en un problema, consiste en enseñarle a nuestro perro una orden para que ladre, cosa que aprende muy fácilmente. Seguidamente, le enseñaremos otra para que guarde silencio, recompensándole efusivamente cuando esté tranquilo. Esta técnica es muy útil también para evitar que ladre en el coche, algo que esta raza tiene tendencia a hacer a menudo.
El Border Collie tiene instinto cazador, y si no se adiestra adecuadamente, puede lanzarse a perseguir bicicletas, coches, gente corriendo o cualquier otra cosa que le despierte su instinto.
La socialización también es importante para esta raza, ya que el miedo puede provocarle una reacción no deseada. Esto es más acusado en las hembras. Hay que fomentar el contacto con otros perros lo antes posible.
Finalmente, hay que tener presente que todas las técnicas de adiestramiento serán inútiles si nuestro perro no recibe ejercicio suficiente. Esto se aplica a todos los perros, pero es especialmente importante en el Border Collie, ya que tiene un nivel de energía muy superior a la mayoría de razas de perro.
