La peste roja, peste bubónica roja o vibriosis es una enfermedad parasitaria que afecta a peces de agua marina, y que está provocada por la presencia en el organismo del animal de la Vibrio anguillarium. Es una enfermedad poco común, pero habitualmente mortal, y se puede definir como la más grave de todas las que afectan a los peces del acuario marino.
Los primeros síntomas son los habituales en cualquier brote de enfermedad, tales como espasmos, falta de apetito, apatía o descamación. Pero además los peces presentarán manchas rojas en el vientre y los laterales de su cuerpo, ulceraciones, aletas enrojecidas y ojos del mismo color. Además los espasmos se irán haciendo cada vez más violentos y repentinos, llegando a parecer que el pez se ha vuelto loco.
La aparición de este parásito, muy extraño afortunadamente, se da en aguas saladas en torno a los 15 grados de temperatura, aunque también se tiene conocimiento de síntomas en rangos de temperaturas más amplios.
Para combatir esta peligrosísima enfermedad existen ciertos medios específicos, como el sulfato de cobre, en solución prepara de 10 c/c por cada 100 litros de agua. Evidentemente será ideal si la misma se administra al ejemplar enfermo en un acuario hospital, aunque tampoco debería ser perjudicial hacerlo en el comunitario. Eso sí, hay que tener en cuenta en estos casos las especies que pueblan el acuario, ya que algunas como los lábridos son especialmente sensibles al cobre y exigirán una dosis menor para no verse afectadas. En el punto contrario deberá incrementarse cuando el acuario contiene muchos elementos calcáreos como moluscos o madréporas. La mejor forma para prevenir esta enfermedad o cualquiera de ellas, es tener un acuario limpio y sano, para ellos es recomendable hacer test y análisis de acuarios para ver las deficiencias que este presta.
Existen también otros remedios específicos comercializados para combatir esta enfermedad, principalmente con base en la estrepmoicina, aureomicina, y sulfanilamida.